FUENTE: El Comercio

Enfermera de profesión, la ovetense Sara Canteli tiene una forma de desahogarse de la dureza que cada día ve en el Hospital Universitario Central de Asturias: pintando. Una afición que comenzó con tan solo dos años y, doce meses después, su madre le apuntó a clases. Desde entonces no ha soltado los pinceles y las pinturas que ayer llevó a la plaza de Porlier, en el seno de LibrOviedo. Allí presentó su primer libro ‘Pie de obra’, un trabajo construido a través de las notas sobre «los distintos cuadros».

Una lectura «fácil» en la que explica a sus lectores sus «autobiográficos» cuadros, que pueden dar lugar a diversas interpretación: «’Pie de obra’ tiene pocas palabras y mucho arte. Es en realidad, un diario de veinte años de producción artística», que ha ido compatibilizando con sus estudios hasta graduarse recientemente en Enfermería.

Una historia que ayer se tradujo en un cuadro más de su serie sobre el patrimonio marítimo de Asturias. Durante un cuarto de hora usó sus brochas impregnadas con una gama de colores azules y verdes. Todo ello para representar el mar Cantábrico y que firmó como lo hace siempre: poniendo Aras, su nombre al revés.

Sus lectores siguieron cada pincelada con sumo silencio que solo fue interrumpido al final con un fuerte aplauso. A renglón seguido, la presidenta de la Asociación de Libreros de Oviedo, Mar Prieto, anunció que el lienzo será donado a la Cocina Económica de la calle San Vicente.

Canteli no solo desplegó su arte a través de la pintura. También recordó que los artistas ya estaban acostumbrados a los confinamientos antes de marzo del año pasado porque ellos se encierran para crear. Para hacer los trazos que después disfrutará el público en citas como las temporadas teatrales, exposiciones o ferias como LibrOviedo, que ayer sumó su tercera jornada.

Durante la mañana el buen tiempo fue el protagonista y a las doce del mediodía, cuando las puertas se abrieron, ya había cola para acceder al recinto, explicaron fuentes de la organización. Los niños estaban impacientes por ver ‘Pompas y Pompones’ y por la tarde Patricia Valmurián firmó los ejemplares ‘Así fue el triunfo de la nada’.

Después, le tocó el turno a Men Marías con ‘La última Paloma’ y cuando la lluvia ya se apoderó del cielo de Oviedo, tuvo lugar un encuentro de poesía con dieciocho artistas. La jornada se cerró con Sandra Márquez que presentó ‘Concha Quirós. Una librera de raza’.

Todo ello estuvo acompañado por las ventas en las catorce casetas con sistema caja única, con una por cada género literario y donde tiene hueco desde los libros ambientados en Asturias, la novela negra, la narrativa histórica o los cómics y libros para los más pequeños de la casa.

Hoy habrá más actividades que se celebrarán a partir de las cinco de la tarde con la presentación de ‘La muerte de la tristeza’ de Lauren García, ‘Casa Sellada’ que incluye ilustraciones de José Paredes, ‘Danubio’ de Rubén Rodríguez e ‘Infernales, tóxicos y demás parásitos’ de Manolo D. Abad. A continuación, será el turno de Carlos Fernández Llaneza, con ‘Otero. Una ventana abierta a Oviedo’ y la jornada concluirá con José Montero García que firmará ‘Ladridos en el cielo’.